lunes, 29 de noviembre de 2010

Estoy aquí…


Y aquí he retomado las palabras de mi cuna.


Aquí nací, y aquí me dieron cuerda. Una cuerda que a veces fluye a borbotones, y otras se agota hasta extinguirse mi vigilia.

Hoy retomo las palabras de mi cuna para hablarle al enemigo y desarmar la ceguera de su razón; y también, la ceguera de la mía.

Actos, actos, actos de la lengua que saltan de las capas intermedias de la memoria y que dialogan con las capas más profundas de aquella memoria que no le pertenece a este cuerpo de vida presente, pero que sin embargo guarda mi gen egoísta.

Un merenjunge, que revuelto con las palabras prestadas de la universidad y el habla docta, se asienta en mi gramática, que a ratos se me cae, como en los viejos tiempos, cuando una echaba pa’ fuera no más.

“Ellas no callarán por siempre”, a quien se le haya ocurrido esta frase, es muy cierta.




Azul Igaiman Quilaleo


domingo, 21 de noviembre de 2010

"Este no es un libro, es una obra"


Se lanzó el libro “Espacios Abiertos, caminos de la Teología Feminista” -primer libro de autora- de Ute Seibert, en el contexto de la XX Semana de Teología de las Mujeres realizada en Santiago.


“El momento que hoy día compartimos es un hito en nuestra vida como Con-spirando”, expresó Josefina Hurtado, integrante de este Colectivo, al contar que inician una nueva colección llamada “Espacios Abiertos”, después de culminar la colección de la Revista Latinoamericana de Ecofeminismo, Espiritualidad y Teología.


Doris Muñoz, teóloga, agradeció a la autora “por el esfuerzo de sistematizar un proceso de larga data, que en gran parte hemos vivido juntas”. Entre los distintos aspectos del libro quiso referirse específicamente al método: “Ute muestra algunos métodos, caminos, que hemos elegido las mujeres para hacer reflexión teológica feminista. En definitiva lo que encuentro en el texto es una metodología, un camino que empodera a las mujeres y a las personas en general.”


Después de un minucioso análisis a las tensiones instaladas a lo largo del libro, Mike Van Treek, teólogo, concluyó que “el libro de Ute y de tantas otras escritoras que están presentes en él, es testimonio de este humilde caminar con Dios, donde otros peregrinos nos hemos ido encontrando y celebrando.”


Teresa Valdés, socióloga y feminista, en primer lugar dijo que “este no es un libro, es una obra de tremenda riqueza por las historias que relata, y en las que se fundamenta, son las historias de tantas mujeres; por la profundidad de la mirada que busca complejizar en vez de simplificar; porque nos invita a darnos espacios, a reciclarse, a convertirse, a reaprender y a la sanación.”


“Mi trabajo en este libro forma parte de un tejido de años de conversaciones, risas, lágrimas, descubrimientos y resistencias, de nuevas palabras y prácticas de muchas mujeres que he podido recoger, y forman parte de nuevos procesos”, fragmento de la carta que envió Ute desde Frankfurt y que se leyó en la apertura del lanzamiento que tuvo lugar en el Archivo Nacional el jueves 18 de noviembre.



Por Vanessa Naranjo Inostroza



sábado, 20 de noviembre de 2010

La preadolescente que fui


La preadolescente que fui me vino a visitar. Escucha música conmigo. Qué extraños procesos, quién entiende.

De todas maneras no quiero negar nada, le doy rienda suelta a quien me quiera visitar, excepto al wecufe, que lo espanto a la primera.

Igual meto la pata, pero ya me dura menos el arrepentimiento.

Creo entender por qué me visita la preadolescente que fui, no quiere que la olvide y de paso busca consuelo y compañía de la adulta que he logrado ser.

Ahora que ya sabemos la una de la otra, podemos tomarnos de la mano y caminar juntas, agarrar vuelo y correr en las noches ochenteras y de este fin de 2010.

Azul Igaiman Quilaleo


miércoles, 17 de noviembre de 2010

El calor de Santiago


El calor seco de Santiago evaporó la humedad acumulada en el fondo de los cajones de mi alma. Ahora ya puedo llenarlos con cosas nuevas, la madera se ha deshinchado y los cajones vuelven a abrir y cerrar en este clima espectacular.

La nieve de la cordillera ya se fue.

Sol, sol y sol; el dios sol de mi niñez, que se esconde detrás del Cerro Chena, entra por mis pupilas y viaja por mis células irradiando su luz inspiradora.

Antupillan, el pillan del sol regresa a despertarme y acompañarme en las mañanas a tomar desayuno. Ayer lo hizo con los jóvenes adultos de mi genealogía que hoy evidencian las marcas del tiempo en sus rostros y en sus pelos blancos que resisten a la tintura.

Calor, ah, qué rico es el calor. Tanto tiempo pasé bajo la lluvia, que casi me inundo.


Azul Igaiman Quilaleo


jueves, 11 de noviembre de 2010

“Mis mujeres bonitas son las mujeres luchadoras, las mujeres anónimas, las mujeres que no están en el periódico”


Ayer en la 30º Feria del Libro de Santiago, Mafalda Galdames, escritora y poetisa, lanzó el libro “Mujeres Bonitas”. Los poemas de este libro se inspiran en la vida de las mujeres luchadoras y anónimas del campo, contó Mafalda; quien dio lectura a algunos de sus poemas en la ceremonia de presentación.


“Subo a caminar por los tejados de mis vecinos y hago conjuros para espantar a los gatos, a los ratones, a los ilusos que esperan mi caída desde lo alto. Aprieto mis puños, vomito mis traumas, entonces, desde mañana cuando el sol se extienda vestiré mis ropajes de mujer liberada”, poema Mujer Nueva.


Ximena Valdés, prologuista y presentadora del libro, hizo mención al trabajo de tesis de maestría de Mafalda, de hace un tiempo atrás, cuyo tema fue la papa nativa de Chiloé; la presentadora enfatizó la mirada de Mafalda sobre la clandestinidad femenina para conservar la semilla nativa, y destacó la historia de las mujeres chilotas que con astucia, y a escondidas de los planes modernizadores del Indap, sembraban con estas semillas en los claros de los bosques para preservarlas.


“Yo creo que este libro tiene que ver con eso, tiene que ver con que Mafalda es una persona, que aparte de poeta y aparte de escritora, hizo esta maestría de la papa nativa en Chiloé, pero con una sensibilidad especial que yo creo que se refleja en los poemas que les recomiendo que lean”, señaló Ximena.


Jorge Yañez, otro de los invitados a la mesa de presentación, manifestó su sorpresa por el contenido del libro; dijo que cuando leyó el título pensó en “mujeres de plástico”, pero luego descubrió que eran mujeres chilenas “de trabajo, de esfuerzo, de compromiso”.


“Mujeres Bonitas” estará disponible en las mejores librerías del País.



Por Vanessa Naranjo Inostroza



lunes, 8 de noviembre de 2010

Se lanzó el Libro “Sueños y Sentimientos compartidos” en Casa de la Mujer Aurora


La experiencia de participación de 19 mujeres de la comuna de Pedro Aguirre Cerda en el Taller Estímulo de la Memoria se plasmó en el libro “Sueños y Sentimientos Compartidos” cuyo lanzamiento se efectuó el 4 de noviembre. Esta recopilación reúne los trabajos realizados en la Casa de la Mujer Aurora durante los años 2008 y 2009.

“Aprendí a conocer, a reconocer, a descubrir en cada una la riqueza y el valor de las mujeres, tantas veces oculto, negado, envidiado, en fin”, declaró Juanita Alvarado, guía e inspiradora del Taller Estímulo de la Memoria.

Durante el Rito de Celebración, Susana Labbé, expresó a nombre de todas las escritoras y poetas del grupo que “llegamos a este taller como pequeñas semillas fuera de la tierra que fueron sembradas, y que con el correr del tiempo fueron regadas por el conocimiento impartido por la Juanita; y así fuimos creciendo, y alimentándonos también de lo que fue germinando de cada una, y todo lo logrado está condensado en este libro que es nuestro orgullo.”

Talento, integración, crecimiento, amistad, confianza, descubrimiento, amor, fueron algunas de las palabras que cada una de las mujeres fueron pronunciando con cada puñado de semillas con los que fueron creando el mándala en el centro del círculo sagrado.

“Los frutos que fuimos logrando durante este tiempo, ha sido sacar nuestras experiencias y sentimientos más íntimos transmitiéndolos al papel”, expresó Eliana Olate, unas de las participantes y recopiladora de los escritos.

Beatriz Cerda, integrante del taller, reflexionó sobre los significados de su experiencia en este trabajo colectivo: “para superar y aceptar las limitaciones es necesario compartir, convivir con otras personas, y no quedarse sola, nunca quedarse sola.”

Para Lidia Vega, fue una experiencia difícil y enriquecedora “porque yo mujer política, cuadrada, racional, metida en un taller de estímulo de la memoria donde te hacen escribir, te hacen hablar de tus sentimientos que estaban guardados y escondidos, siempre por ahí en un rinconcito, y tener la posibilidad de sacarlo a la luz, no creí, no creí que pudiera ser capaz de escribir tantas cosas”

En el lanzamiento estuvo presente la alcaldesa de la comuna Claudina Núñez; Ana Chamorro, Directora del Consultorio e Isabel Urzúa de Comunidad Mujer, además de mucho público asistente.



Por Vanessa Naranjo Inostroza


domingo, 7 de noviembre de 2010

Me enamoré de ti


Estoy escribiendo en mi corazón que te amo, bajo esta lluvia primaveral.


Dónde se irán las mariposas de éste aguacero, qué vientos tomarán.


Donde quiera que vayan, ellas saben que esta primavera un colibrí se me atravesó en la tierra y en el cielo para abrir y sellar, el comienzo de una nueva era del amor.




Azul Igaiman Quilaleo



lunes, 1 de noviembre de 2010

De vuelta a casa


De todas las veces que he llegado a mi casa, creo que ésta ha sido la que más he sentido que he llegado al fin. Al fin abro la puerta de la reja y sé que he llegado. Al fin las tardes de primavera han vuelto a ser las que eran antes de la partida. Mi mami y mi papi aún están aquí, mis hermanas nunca se fueron y tejen sus sueños por estas latitudes.

La Fiura, mi gata entre comillas, es testimonio de un ayer cercano; la mesa de centro de madera que me afirmaba cuando hacía mis experimentos en uno de los ceniceros de la casa, sigue aquí aunque ahora se tambalea un poco; y los dos platillos de porcelana con arreglos florales estampados que siempre colgaron de la pared, aún afirman los tijerales de antaño y de hoy.

Eso sí, echo de menos las baldosas de la Antupillán.