lunes, 29 de marzo de 2010

La Prensa Independiente se sentó a conversar en mesa redonda


“A mí me gusta mucho esta idea de lo sexy, pero me parece insoportable que lo único sexy sea el cuerpo de las mujeres, en realidad tenemos bastantes más cosas sexy, por ejemplo las ideas, la rebeldía, la creatividad”, señaló Teresa Valdés Echenique, Coordinadora del Observatorio Género y Equidad en respuesta a los dichos de Mirko Macari, Director del diario electrónico El Mostrador en relación a que el negocio de este diario es contar historias sexy para una elite, quien además validó el uso de la sensualidad de las mujeres para vender la prensa, “por qué no, si el cuerpo vende”, dijo en la mesa redonda dePrensa y Poder: ¿y ahora….? Los desafíos de la prensa independiente en el nuevo escenario político“, realizada el 26 de marzo en la Fundación Friedrich Ebert.


Temas como la publicidad, el duopolio de los medios de comunicación, la desigualdad, la libertad de expresión y el pluralismo fueron abordados por los panelistas Francisco Martorell, Director de El Periodista; Víctor Hugo de La Fuente, Director de Le Monde Diplomatique y Sebastíán Larraín, Director de El Ciudadano, a excepción de Macari quien planteó su desacuerdo con los medios presentes en términos de sus pretensiones, desafíos y lógicas de funcionamiento, “el diagnóstico crítico que hay sobre la llamada prensa independiente, hoy es una suerte de lloriqueo añejo, que no es capaz de leer las nuevas realidades, que no es capaz de hablar de audiencia, de mercado y que está muy condicionada por una generación marcada por la guerra fría”, sentenció el periodista.


La mesa no tardó en reaccionar ante las provocativas palabras del director del El Mostrador: “No es lloriqueo, es entender una realidad de los medios de comunicación aquí en Chile”, dijo Martorell. Por otro lado, De La Fuente aludió a que los dichos de “los lloriqueos añejos, no hay que mirar el pasado” ya los había escuchado mucho y que ya hay bastantes enemigos por allá para estar pegándole a los de acá”. En el caso de Le Monde Diplomatique “sí queremos cambiar el modelo y no nos da lo mismo quien gobierne”, puntualizó de La Fuente para marcar la diferencia con Macari quien explicó que “la política hoy en día, que es nuestro objeto de trabajo, es una suerte de escenario de espectáculo, y nosotros contamos esa lógica de política como espectáculo, pero no somos responsables de eso”.


Más allá de la polémica generada por la personalidad de Macari, este espacio fue un buen punto de partida para acercar a los actores de la prensa independiente en torno a temas tan necesarios de abordar como el pluralismo y la necesidad de contar con medios que contribuyan a dar espacio a temas y voces de la ciudadanía.


Para Larraín que define el trabajo de El Ciudadano como contra información “es responsabilidad del Estado fomentar que exista mayor pluralismo de la prensa”. Para De La Fuente, no importa el tipo de periodismo que se haga, lo importante es que haya pluralidad de periodismos “porque es el tema de la libertad de expresión, que los ciudadanos tengan el derecho a informarse libre y pluralmente”.


Finalmente Martorell recomendó pequeñas grandes cosas para proteger la existencia de los medios independientes tan simples como leerlos “y encontrar algo que les guste, difundirlo y citar la fuente”, así como también, no regalar chocolotes, perfumes o vino, sino que suscripciones.


Por Vanessa Naranjo Inostroza